Consumid malditos consumid

 

 

CONSUMID MALDITOS....CONSIMID

 

En el mundo animal hay una serie de factores que muy lentamente y a lo largo de generaciones van influyendo e incidiendo para mejorar cada especie. A este fenómeno, los estudiosos le llaman selección natural. La depredación , el afán de superviviencia, la adaptación al medio, entre otros factores , son los que van ejerciendo una mejora genética en el mundo animal, provocando que solo los mas aptos sean los que sobrevivan y con ello mejorar la raza. En la especie humana , la selección natural se mide por otros parámetros, ya que nuestra selección es social , y se deja influenciar muy mucho de factores impuestos por intereses de clase, ambiciosos y antisociales y que en vez de mejorar la especie socialmente , tratan de aborregarnos hasta que perdamos el norte . Al ser animales sociales, aparecen las castas dominantes que tratan ....y consiguen imponer sus leyes , normas, costrumbres en consonancia con sus ambiciosos intereses.

 

A ningún sistema, sea del signo que sea, le interesa que sus ciudadanos piensen, porque obviamente cuestionarán su gestión y les crearán problemas; para ello , el sistema se dota de poderosas herramientas para adormecer o domar conciencias y para manejar y dirigir al rebaño por donde interese al pastor. Nunca el poder establecido ha tenido tal dominio de su rebaño como el que actualmente tiene...y todo ello , y sobre todo, gracias las nuevas tecnologías, a la televisión y a su influencia. A través de ella nos llegan directa o sublimalmente las directrices del pastor, es decir: el pensamiento único, y para que no tengamos tiempo para pensar en otras cosas, nos saturan 24 horas al día de programas basura, fútbol y publicidad. Ese poder en la sombra existe, pero nunca ha sido tan dificil como ahora detectarlo, pues le llaman una cosa tan ambigua como los mercados que no son mas que ingentes cantidades de dinero especulando en las bolsas con una enfermiza sed de plusvalías a cuyos pies se rinden politicos y gobiernos.

La única forma de controlar el poder (si es que alguna vez fuese posible) es conocerles desde su génesis, conocer sus métodos y hasta donde llega su influencia.

El poder se puede manifestar de forma grosera , haciendose notar sin tapujos, en ese fango se mueven las dictaduras con sus controles policiaco/militar/religioso; pero también se puede mostrar de forma sibilína, intentando pasar desapercibido, licuándose para eliminar de esta manera cualquier resistencia a integrarse en el sistema y tratando de llegar al ego de los individuos para desarmarles y para convertirles en dientes del engranaje de su maquinaria de saqueo y en individuos narcisistas, posesivos e insolidarios, de tal manera que nos convierten en consumidores insaciables y en espectadores pasivos de todo lo que pasa a nuestro alrrededor.

El poder no es exclusivo de las clases dominantes, el poder crea pequeños reinos de Taifás que conforman una pirámide, donde los estrátos superiores tratan de dominar a los inferiores hasta llegar al último escalón que es la exclusión social, es decir, el consumidor que casi no consume o consume residuos.

El consumismo es la nueva cultura, es el ideario, es el pensamiento único, es la nueva religión, es el objetivo del sistema capitalista y con ese objetivo, la ciudad se convierte en un centro comercial global que todo lo inunda y dejamos de ser ciudadanos para convertirnos en números, en estadísticas , en consumidores.

La herramienta que el poder utiliza para desarmar ideológicamente a las capas inferiores es el consumismo,de tal manera que el deseo y el "derecho" de consumir sistutuye los derechos cívicos, ,Lo mismo que los espacios públicos se convierten en espacios comerciales y publicitarios, la libertad de elegir (la compra) se va imponiendo a la libertad de pensar, las bolsas de compra poco a poco sustituyen a las ideas, los sentimiento éticos del ser humanos se convierten justo en sentimientos puramente estéticos, y la publicidad son los signos sociales que sustituyen a la ideologia, a la comunicación, lo que logra conseguir un desarme ideológico de primer orden.

Un ejemplo vomitivo, pero ilustrativo de esa colonización del espacio público , es el cambio que en Madrid está teniendo una línea de Metro, donde los nombres de las estaciones tradicionales les están prostituyendo de tal modo que ya no podremos decir: voy a coger el metro de Sol, sino voy a coger el metro de Vodafone.... realmente patético. Ya hay centros culturales con nombres de marcas de helados y se rumorea que se anda en negociaciones con Coca-cola para que el estadio del Real Madrid cambie de nombre.

Últimamente, se han puesto de moda en los pueblos y ciudades peatonalizar algunas calles céntricas, algo que deberiamos considerar un avance social, ya que la ciudad se humaniza e incita al paseo y a las relacciones sociales en contra del automovil. La verdad , es que en muchos casos, esa peatonalización , mas que socializar la calle, implica , comercializarla, convertirla en una calle eminentemente comercial.

Ir de compras ha dejado de ser una necesidad vital para proveerse de las mercancias necesarias, para convertirse en un acto ritual, cultural y de ocio. No se puede consumir porque nos lo dicten las modas o la publicidad, hay que consumir todo lo que necesitemos, faltaría mas, pero nunca lo que sea superfluo o innecesario, nunca consumir por el hecho de consumir.

Todos sin excepción somos consumidores desde el momento que en el pasado dejamos de ser recolectores o pastores para nuestro auto-consumo y comenzamos a practicar el trueque o la compra de productos ; de modo que todos somos consumidores por necesidad y naturaleza social. El problema surge cuando el leit motiv de nuestra existencia es consumir por consumir, consumir compulsivamente para poder ser ???? como los demás y estar a su altura.

El consumo es imprescindible para poder cubrir nuestras necesidades básicas , para conseguir estabilidad y seguridad; cuando estos deseos consumistas se convierten en obsesión, el goce y disfrute de esos porductos deja de ser el fin y se convierte en un problema.

A partir de los 70 aparecen grupos sociales que tratan de imitar el nivel de vida de las clases mas altas, lo que origina una clase media clonada y un medio urbano donde todo es anuncio, todo es escaparate. El centro comercial es hoy por hoy el templo donde muchos ciudadosn desarrollan su vida social , relegando a un segundo plano las zonas públicas como plazas y parques como lugares naturales de vida social. Ya lo decía la cantante Martirio, en una de sus canciones nos contaba que una vez uniformada socialmente con su chandal y sus tacones:
Con los niños por delante 
nos vamos al hiper. 
Mi marío tiene, por fin, 
la tarde libre, 
y a empujar los carritos, que ole, 
nos vamos al hiper.La publicidad que todo lo inunda, es la muletilla global que utiliza el sistema para convertir todo nuestro entorno en un centro comercial global. Desde que salimos de casa hasta que volvemos a nuestro destino, nos toparnos con reclamos publicitarios, ofertas, anuncios... todo un idílico paisaje, para luego chutarnos en nuestra propia casa otra dosisde publicidad que nos dosifica la televisión. Una tentación constante y una incitación al consumo desbocado.

Ante el problema actual del paro, son mayoría , tanto de derecha como de izquierda los que nos dicen que hay que consumir mas para que se creen mas puestos de trabajo. Por supuesto que es obvio que a mayor consumo mayor producción y por ende mayores horas de trabajo. Pero que el problema no se soluciona solo con mayor consumo, el problema se resuelve con reducciones de jornada de trabajo sin bajadas de salario. La tecnología ha ido sustituyendo a la mano de obra y hoy por hoy es imposible que haya trabajo para todos, hay que repartir ese escaso trabajo. Lo que si es aconsejable es consumir amigos, tiempo libre, paisajes, dialogos, conviviencia, cultura, familia etc... ese es el consumo social que interesa.

Aumentar el consumo pues, no implica necesariamente mas trabajo para todos, la solución está en equilibrar la producción y la jornada de trabajo, además de prohibir los artículos con obsolescencia programada en favor de los artículos duraderos y producidos en la proximidad, teniendo muy en cuenta el impacto del consumo sobre la naturaleza.

Nunca seremos mas y mejor por consumir mas, calidad de vida no es consumir o tener mas cosas, es difrutar de ellas, siendo consumidor responsable, nunca compulsivo.Los publicistas, profesionales inteligentes donde los haya, conocen la mente humana y en un anuncio de un refresco de limón nos describen una escena surrealista a la vez que real, donde un niño rodeado de regalos , los desecha todos a excepción de uno que le vuelve loco y resulta ser UN PALO......para pensarlo.

La publicidad se preocupa de recordarnos en cada momento que si ese o aquel producto no lo consumimos, nos estamos autoexcluyendo, hasta tal punto se llega que muchas veces somos nosotros mismos los que hacemos de valla de publicidad gratuita con la ropa que vestimos...todo un síntoma.

Es la publicidad la que nos arrastra a los centros comerciales, esos templos donde tratamos de solucionar todas nuestras necesidades y problemas, afectivos incluidos.

Para un consumidor compulsivo, consumir cumple una función placentera y de felicidad y es vivido como un acto de libertad y autoafirmación , ya que podemos elegir entre una u otra marca de un producto. Ir de compras es la palabra mágica que proporciona euforia y auotestima a mucha gente, pero esa magia se rompe cuando salimos del centro comercial y su zona de influencia, rompemos el envoltorio de lo que hemos adquirido y nos encontramos solos ante la cruda realidad: el paro, la precariedad, los bajos salarios, el no llegar a fin de mes, las hipotecas etc etc...., y esa idílica nube que nos porporciona el consumir y los templos de consumo, nos explota en la cara.

El consumo provoca la desaparición de pertenenecia a grupo o grupos vivos, con personalidad, para convertirnos en miembros de grupos estéticos, o en una acción individual lo que puede dar lugar a multitudes solitarias con bolsas en una mano y un teléfono movil pegado a la oreja en la otra. Los grupos de consumidores se conforman en torno a modas (tribus urbanas) sin mas transfondo ideológico , sin nada debajo del "uniforme" , resultando solo una actitud estética, que no ética. En una reciente entrevista, la cantante Alaska dijo una frase lapidaria: "Odio a la gente que rechaza que se crea una personalidad a través de la ropa". Me imagino que esta mujer tendrá terribles traumas cuando se despoja de toda su "personalidad textil" y se queda en bolas para ducharse.

El crédito, el dinero de plástico, es el vehículo imprescindible para transitar por el mundo consumista, creando una situación de permanente endeudamiento , sentimiento capitalista que eleva la autoestima y la sensación de libertad del consumidor. El crédito ha contribuido en gran medida a la desmembración de la clase obrera, ya que el crédito permite aspirar a igualar a las clases superiores provocando un desapego a su propia clase para convertirse en masa de consumidores empeñada en mantener un determinado nivel de consumo, claro, que solo mientras que podamos tener un salario.

Con la actual crisis , lo lógico es que la gente nos echáramos a la calle contra la inseguridad en el trabajo, los bajos salarios, la reforma laboral, la injusticia de la justicia, la corrupción etc etc...., sin embargo, perece que un miedo paraliza a parte de la clase trabajadora que reza incesantemente aquello de !Virgencita, virgencita...que me quede como estoy! a pesar de los recortes salariales, la precaridad laboral , las injusticias, la hipoteca y los créditos que hay que pagar son la soga que mantiene a muchos ciudadanos sin saber que rumbo tomar. Las deudas colonizan y monopolizan nuestra mente y en nuestras vidas mandan los mercados ( ..y los bancos).

La clase obrera sigue existendo a pesar de que gracias al fervor consumista, muchos hayamos perdido algún peldaño en el escalafón de valores, y uno de esos valores, es esa cosa tan necesaria que es preciso tener, que se llama CONCIENCIA DE CLASE.

Siempre existió la lucha de clases, y por obvios intereses de clase, siempre la clase obrera ha estado enfrente de la clase dominante, de la clase alta. En 2001 , el multimillonario Warren Buffet dijo: "La lucha de clases sigue existiendo, pero la mia va ganando". ...y por goledada diría yo.

La dilucción y desnortación actual de la clase obrera está teniendo catastróficas tensiones entre la propia clase obrera y con resultados sangrantes como explotación inconcebible volviendo a cotas de hace 30-40 años, a insolidaridad e insensibilidad preocupantes y lo mas grave al indiviudalismo.El consumismo desmoviliza.

Antiguamente, cuando se hablaba de clases sociales, se hablaba de la clase alta que es la clase dominante; la clase media, formada por empresarios pequeños, autónomos, comerciantes y profesionales (abogados, médicos, farmaecuticos etc) y la clase trabajadora..

Al dia de hoy, en el léxico de los medios de comunicación ya casi no se habla de la clase trabajadora, es como si hubiese desaparecido , parece que solo queda la clase alta y las clases medias; la clase trabajadora ha desaparecido y ha sido sustituida por los excluidos, es decir, aquellas personas que el sistema considera no consumidores, por los excluidos sociales, los que ya no encontrarán casa, trabajo y que dificilmente podrán ser consumidores "normales". De modo que en un afán de desxonexión linguista , así de golpe, excepto los excluidos, todos los currantes somos clase media. !Como avanza la sociedad!

El mando a distancia , la tarjeta de crédito y el consumismo ha representado para muchos miembros de la clase obrera romper las barreras que les separaba de la clase media/alta, de la clase dominante, lo que provoca una extinción o un adormecimiento de esa tan necesaria conciencia de clase tan necesaria para no bajar peldaños en las conquistas conseguidas en pasadas luchas.

No es dificil adivinar porque veredas nos quieren seguir metiendo, cuando de las universidades eliminan asignaturas humanistas en beneficio de las técnicas y en las escuelas quitan Educación para la ciudadania para sustituirla por Religión. Otro síntoma mas de por donde van los intereses del pastor.

Según estudios serios, una tercera parte de los ciudadanos europeos somos compradores/consumi-dores compulsivos, es decir, presentamos una alta e irrefrenable necesidad de consumir productos que a veces para nada necesitamos. Esta adición al consumo va en cierto modo ligado a una ansiedad vital, a una insatisfacción personal y a falta de estímulos sociales, haciéndonos muy vulnerables a los reclamos publicitarios. Es la juventud el sector de población mas vulnerable a la adición consumista ya que sucumben fácilmente por el aburrimiento y la falta de perspectiva a medio y largo plazo.

Hay niños que se sienten desgraciados y pobres porque no pueden tener el último teléfono móvil , a pesar que el que tiene era lo mas de lo mas tan solo hace tres meses.

El sistema capitalista, para sobrevivir, precisa que la sociedad sea consumista , que compre masivamente productos inútiles o inecesarios y que los desechemos rápidamente (aunque esten en buen uso) para que sigamos comprando lo último de lo último. Ya se ocupan ellos de que los productos duren poco (obsolescencia programada) . La publicidad machacona es esa gota malaya que nos tortura minuta a minuto para que consumamos hasta la extenuación esa serie de productos con "mejores prestaciones" que los que ya tenemos.

Una poderosa arma para defendernos de la avalancha de productos que nos acosan son las asociaciones de consumidores, esas que analizan productos y luchan por los intereses de los consumidores, es decir, por todos. Desgraciadamente, la afiliación a estos colectivos es pírrica y despreciamos olimpicamente esa poderosa arma que no nos libraría de algunos de los peligros del consumismo, pero que al menos nos serviría de escudo y de concienciación ciudadana.

El periodista canadiense Emile Henry de Gauvreay nos dejo esta frase que resume en gran parte todo lo que aquí he querido decir: "Hay gente que se pasa la vida haciendo cosas que detesta para conseguir dinero que no necesita para comprar cosas que no quiere para impresionar a gente que no le gusta".

No vendrá nadie a decirnos lo que tenemos que hacer, pero en verdad , lo primero que hay que hacer es recuperar la manía de pensar.

 

Félix Martín Vilches